Puente de Marghera

El diseño del proyecto nació del estudio parisino Jean Muller International (JMI) y fue expuesto en la muestra “Venecia: la nueva arquitectura” del año 1999, ya que la realización de esta obra, con una inusual estructura curvilínea y una antena que alcanza los 75 metros de altura, se transformó en el símbolo de la reconversión del área industrial de Porto Marghera.

Puente de doble calzada, de 27.7 metros de ancho y con una estructura curvilínea de 421 metros de longitud, que cuenta con un radio de curvatura de 175 metros. Las dos arcadas principales son atirantadas, con 18 tirantes dispuestos sobre una única alineación y sostenidos por una antena de sección variable triangular realizada de cemento, de 75.4 metros de altura e inclinada 19° respecto del eje. En su conjunto, el peso del acero alcanza las 4.710 toneladas. Durante la ejecución, el área circundante a la obra permaneció siempre abierta al tráfico portuario y vial. Ante la necesidad de subsanar la ausencia de áreas y las notables limitaciones al espacio de maniobra, una particularidad del montaje consistió en montar las arcadas centrales de atravesamiento de la dársena portuaria directamente sobre una barcaza. Como consecuencia, la estructura fue colocada entre la pila central y las pilas provisorias adyacentes a la orilla y bajada sobre los apoyos con la utilización de cuatro torres hidráulicas. Las operaciones han sido llevadas a cabo en 12 horas por arcada, en función de las condiciones favorables de la marea.