El puente Guayllabamba se encuentra sobre la nueva autovía que conecta la capital, Quito, con el nuevo aeropuerto de la ciudad y permite el tránsito de 15.000 vehículos al día, lo que contribuye a incrementar el desarrollo económico y turístico local.
Este puente del tipo de caballete tiene una longitud total de 150 metros con una luz central entre los apoyos de 105 metros. Una de sus dos arcadas terminales es en curva y está compuesto por dos calzadas independientes con una anchura de 12.0 metros cada una y un peso total del acero de 1.240 toneladas. La fase de montaje tuvo lugar en un territorio intransitable, lo que ha obligado a trabajar en un espacio de maniobra mínimo, generando problemas de accesibilidad a la obra. Entonces, para acelerar los tiempos de ejecución, se optó por un método de montaje de tipo mixto: los codales del caballete fueron instalados y mantenidos en equilibrio a través de la utilización de cables provisorios, la porción de eje rectilíneo del tablero metálico fue colocada de punta, mientras que las arcadas terminales fueron montadas con camión grúa.